Poema de Carlos Carbone
TANGO
Ella me pidió que le
enseñe a bailar el tango
yo
le vende los ojos
le puse tacones
negros de quince centímetros
y la desnude
Esa noche ella
aprendió.
© Carlos Carbone
entrada de Gustavo Tisocco a las
12:49
17 comentarios:
Creatividad y un gran acierto , ella aprendió , buenísimo
maria elena tolosa
Buenìsimo
que suerte que tenìas para enseñarle
desde graciela
palabra e imagen: maravillosas. susana zazzetti.
Espléndido poema donde hay síntesis y erotismo y una malévola (maleva)intención como un compás.Bravo, Carlos. Un beso Isabel Llorca Bosco
Bellisimo !!!! y muy sugestivo. Me encantó poeta. muak.
Enseñar con sensualidad y aprender al unísono, muy bueno
Abrazos
Betty
ESE DESNUDAR EL ALMA!...
CON ALMA Y VIDA ENSEÑAR!...
ESTE POEMA HERMOSO TIENE EL COMPÁS DEL AMOR!
GRACIAS POR COMPARTIR!
LIDIACC.
BUENÍSIMOOOOO, AMIGO!!
bESOSSSSSSS
Cumpa, se ve y se sospechaba que sabés de "tango", muy buena clase
Ignacio
Hola Carlos:
una gran sensualidad y picardía brillan en este breve poema que nos cautiva. El final es logradísimo Irene Marks
Uaaaauuuuu!
Celina
Te lo escuché y me encantó, y ahora que lo leo, me sigue gustando muchísimo.
Abrazo,
Alicia Márquez
Muy bueno Un abrazo Siempre...
guau, cuanta imaginacion en tanta brevedad
patricia corrales
Elegiste enseñarle a bailar el tango.La sensualidad cae en cataratas de este poema.
Un abrazo
Susana Giraudo
David A. Sorbille dijo...
Querido Carlos: genial poema. Un abrazo
¡Qué magnífica clase de tango! Y mientras ella aprendía vos ya barruntabas el poema y qué impresionante poema, querido Carlos.
Jorge Luis Estrella
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