Poema de Héctor Miguel Ángeli
Envío de una mariposa que viene de la infancia
A Roberto Aparici
Querido
Miguel:
cariñosamente
encontré
una mariposa para vos
en el cuerpo de mi infancia.
Parpadeaban sus colores
en mi jardín de tierras ausentes
frente a una casa
poblada de padres.
Yo sé que es muy poco
lo que puede decirse
de una mariposa,
pero resulta que a ésta
la maté yo
y muy alegremente
y muy alegremente también
la enjoyé con alfileres
y la puse a trabajar de recuerdo.
Eso ocurrió
un día
en que aquí y allá
asomaba el verano
su nariz de payaso.
Así ha coincidido
mi infancia
con tu edad desolada.
Esta mariposa es mi único crimen,
cometido
cuando el crimen podía sorprender.
Hoy matar a un hombre
es más común
que matar a una mariposa,
por lo tanto
necesito admitir
que todo es insignificante.
Me parece oportuno entonces
enviarte
esta frágil memoria de las flores.
Recibila
como un nada fantástico testimonio
de que algún día
puede matarte
muy atentamente.
Formado: Roberto.
© Héctor
Miguel Ángeli
Foto: Gustavo Tisocco
entrada de Gustavo Tisocco a las
0:50
22 comentarios:
este poema me atraviesa como un alfiler, bellìsimo don Hèctor!
lo admiro
claudia tejeda
Héctor, cometí el mismo crimen que vos, pero aún no le escribí un poema, me faltó lo que a vos te sobra "maestría"
Me parece genial. Tan cargado de ironía y con algunas imágenes tan bellas. No deja de ser despiadado este poema, además.
Abrazo
Alicia Perrig
Un crimen tan inocente como las manos de aquel niño que fuiste. y un poema tan inocente como su propia belleza. Un abrazo.
Gastón Sequeira
Una nueva demostración de la maestría y sensibilidad de Hector Miguel Angeli
Beatriz Minichillo
Una nueva demostración de la maestría y sensibilidad de Hector Miguel Angeli
Beatriz Minichillo
Una nueva demostración de la maestría y sensibilidad de Hector Miguel Angeli
Beatriz Minichillo
Cuando las palabras se clavan y dejan todo al descubierto aún aquello que creíamos insignificante y todo queda en el aire flotando y creyendo ser una simple mariposa que su vuelo al ras, deja la memoria en carne viva!
poema bello y profundo, una estructura con la sencillez de lo verdadero. Un abrazo. Yolí
Genial Héctor
maestro de las letras
amo tu poesía
desde graciela abrazo
Se puede decir tanto de las mariposas Miguel que no terminarías nunca de escribir, yo no recuerdo si mate mariposas pero si se que las amaba y aún hoy las recuerdo, bellísimo tu poema
maria elena tolosa
Hèctor:¡ esa crueldad infantil que es sin embargo inocente, ya que no sabe lo que hace! Nunca maté una mariposa, lo confieso, sólo cucarachas(que despuès de todo, estàn vivas, tambièn).El niño sin embargo,recuerda, como vos en este poema y esta carta, conmovedora, escrita desde el recuerdo de una infancia "frente a una casa poblada de padres".Irene Marks
Que poema interesante!
Abarzos
Marta
Una irónica muestra de los cambios de la humanidad, dicho con la llaneza de un niño y la maestría de un gran poeta, felicitaciones.
Betty
Simplemente, un poema estupendo y es semejante esta extraña sensación de nostalgia al leerlo que escucharlo de su voz. Gracias Maestro.
Abrazos.
Andrea
Gocé el otro día al escucharlo. Gocé recién al leerlo. Poema maravilloso, antológico. Gracias.
Jorge Luis Estrella
Gracias Hector, qué más le puedo decir.
Andrea
FILOSOFÍA DE LA VIDA, LA MUERTE, LA INOCENCIA, LA VERDAD, ETC,ETC. NO FALTÓ NADA
SALUDOS
ANAHI DUZEVICH BEZOZ
estas cosas pasan si vives largo, y hasta muchas veces, resucitan.
Alegre en su tristeza, lindo cantar de la culpa.
Marta
Espléndido poema. Habla del presente, refiriéndose al pasado; del futuro, hablando del presente, y, en definitiva, de esa fusión de tiempo que somos todos nosotros. Me encantó. Un abrazo. Adriana Maggio
La perfecta consturcción de un gran poeta, en esta carta que refresca una "frágil memoria". Saludos
Isabel Llorca Boscoi
Hermoso poema. Felicitaciones.
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