Poema de Francisco X. Fernández Naval
TEOREMA
Ápodos,
así son los sueños.
Sin pies pero con alas, como rostros de colores
que fecundan el aire.
Ingrávido el sueño y también el canto
proyectado en ondas excéntricas
a navegar en el líquido amniótico del plancton, en la brisa,
en el fulgor crepuscular de un oasis
o en la humedad del bosque
que arderá esta tarde.
El teorema tiene pies,
artrópodo pesado y tautológico
que persigue al insomnio por el pasillo de casa
evaluando el polvo,
diseccionando la espera. Miles de pies en la ecuación rentable
del cetáceo, en la deportación, en el campo de refugiados
donde no hay una silla para el sueño,
donde los retratos queridos no iluminan las paredes.
Pies que persiguen árboles inmóviles, que solo saben
del tempo circular y de la sombra del canto
que germina.
Los cetáceos se suicidan sumisos, entregados,
varados en los arenales de un océano
cerrado como un campo. Los cetáceos
varan en silencio, exposición contable de la agonía
y del espasmo. Delante de los tanques los niños lanzan piedras
de espuma, los adolescentes se inmolan en el arenal de la tristeza,
en la praxis de la derrota,
en la explosión contable de la violencia.
© Francisco X Fernández Naval
5 comentarios:
Hermosísimo poema, descripción de la vigilia y del sueño, de los pies y las alas,del sentimiento que golpea con espuma. Muy bueno.
Ya lo sabemos, la representación es de origen mental, el símbolo, de lo social...que grato encontrar esa complejidad en un poema que entrecruza ambas cosas felizmente.
W.M.
Los sueños enfocados con mucha sutileza
maria elena tolosa
El poema en la trama del tiempo circular de tejido cuidadoso y original
muy buen poema/original
desde graciela abrazo
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