Poema de Rubén Amaya
una mujer está subiendo
desde el remoto paso
de mi primera ausencia
una mujer que intento nombrar
y no alcanzo sus nombres
porque una tempestad a manotazos
los va sembrando en mis heridas
hay una antigua soledad
que me pregunta
porque ranura vital
esa mujer se me filtró en la sangre
una mujer me viene venciendo la tristeza
me está golpeando el corazón
para voltear sus puertas
me está abriendo la pìel a pedacitos
para reconstruir su verdadero rostro
con los fragmentos de mi alma
esa mujer despide un fuego verde de sus ojos
y me alumbra la boca
esa mujer va a devorarme
y yo le haré el amor
emboscado en su vientre
© Rubén Amaya
5 comentarios:
Me encantó tanta pasión y entrega.
Aplausos.
Un abrazo.
Dragontesa Leuzzi.
SE ENLODAN LOS NOMBRES, SE ENMASCARAN Y EL AMOR HUYE CON LA VIDA
Y UNA Y TODAS FORMAN LAS CICATRICES
DEJAN EL SABOR DE LO VIVO AÚN EN CADA PELDAÑO DE VIDA.LIDIACC.
Guauuuuuuuuuuu Rubén, cuánta pasión poeta!11
Me maravilla!!
cariños!!
"El nombre de una mujer me delata. Me duele una mujer en todo el cuerpo" (J.L. Borges)
Que esa mujer logre su cometido. Felicidades
David Rosales
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