Poema de Alicia Márquez
Pilar
Era la hora de la siesta.
Le cantaba automáticamente,
canciones de la infancia.
Le cantaba mientras pensaba
en la foto obscena de un presidente
devenido dictador por conveniencia
petrolífera, asesinado salvajemente.
Le cantaba mientras escuchaba
a los poderosos decir que el mundo
se había convertido, ahora,
en un lugar más seguro.
Le cantaba mientras cavilaba sobre la inutilidad
de la poesía, ante ciertas circunstancias.
Y entonces Pilar, la pajarita, me interrumpió y me dijo
que en el bolsillo yo tenía un caballo azul,
una torta, caramelos y el color verde.
Después, se dio media vuelta y se quedó dormida.
© Alicia Márquez
10 comentarios:
dureza. realidad . mixtura donde la ternura las sobrepasa. hermosísimo. susana zazzetti.
Que bello ali/
pese a todo el amor................
pajarita dulce
desde graciela abrazo
Hermoso. Lleno de ternura. En el bolsillo también tenías seguro este poema. Besos.
Alicia, a tu amor de hermana Chapeax (creo que se escribe así). Hermosísimo poema, beso de Alicora.
David A. Sorbille dijo...
Querida Alicia: extraordinario poema. Lo inútil que parece todo en este tiempo y la respuesta de tu poesía, la vida misma que vale la pena vivir. Un abrazo
Ternura en grandes dosis, sos vos y este poema.
Hermosísimo Ali.
Muy bello Alicia...esa "pajarita", el azul y tu hermoso final le da sentido a la Poesía, a su mágica función!
Abrazo
Montse Bertrán
Bellísima conjunción de crudeza de la realidad y esa ternura final de la pajarita...
¡Qué maravilla tu poema, Alicia!
Aplausos y besos
María Rosa León
Querida Alicia, tal parece que con la ayuda de tu pajarita recuperaste tu unicornio... celebro tu poesía.
Querida Alicia: Fluye la poesía en tus palabras. Plenitud de vida. Un beso. Miguel Madrid.
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