ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS
La pelota del balón se desvió
y tiró en la vereda con forma de rayuela
ahí, cerquita de la barrera
a la farolera que tropezó.
Su carita de muñeca vestida de azul,
en la calle se manchó
con la mancha venenosa.
Estaba cantando
con la paloma blanca, el Vals de las horas,
para Mambrú,
Él era un soldado que dicen murió en la guerra.
Todo mentira,
en la plaza de la calesita, entre otras estatuas
está la suya, y en las noches de luna llena cobra vida
para desfilar al son de una marchita,
montando el caballito con los ojos vendados.
Por el tobogán de la vida
se deslizaron mis sueños,
y los raspones contra el suelo no fueron pocos.
El sube y baja, me alzó y bajó a su antojo,
dándome la yapa acaramelada de los recuerdos.
En las hamacas pude ver más allá de mi estatura.
Ahora, con el alma
subida en la bicicleta azul metalizada
recorro las fotos amarillas de mi niñez
y deslizo mis dedos sobre ellas.
Tal vez como el hada del cuento de Pinocho
pueda darles vida, humanizarlas y ser por unas horas
esa Alicia en el País de las Maravillas,
que recobra por un minuto su corazón de juegos.
© ALICIA CORA FERNÁNDEZ
recuperar las maravillas de ese continente pleno de magia que es la infancia, el placer lúdico. Todo dicho en un clima de nostalgia. Felicitaciones Alicia.
ResponderEliminarElisa Dejistani
UN BELLO POEMA DONDE LOS RECUERDOS COBRAN VIDA DE LA INFANCIA RELUCIENTE EN AÑORANZAS Y EL REVIVIR CON LA LUZ ESPLENDOROSA DE LOS PRIMEROS TIEMPOS.
ResponderEliminarLIDIACC.
Bellísimo, me has remontado a esa niñez mía.
ResponderEliminarUn abrazo
Bellísimo viaje de regreso a la infancia recuperando ese corazón de juegos, Alicia.
ResponderEliminarAplausos, bises y besos
María Rosa León
!!Mi infancia reflejada en este poema . !! HERMOSO !! Lia
ResponderEliminarEs una poesía llena de seducción y encanto que nos hace recordar al niño que duerme en nuestras almas y despierta cuando alguien como Alicia lo toca con su varita mágica.
ResponderEliminarGracias Cora poer recuperar por un ratito el espíritu lúdico de nuestra infancia.
ResponderEliminarBellísimo, Alicora. Recuperar aquello, lo perdido. Y recordarlo siempre.
ResponderEliminarUn abrazo,
Alicia Márquez
Un derroche de ingenio entrelazar los juegos inolvidables de la infancia con la poesía. Felicitaciones y muchos besos de Eduardo Calabrese.
ResponderEliminarHermoso poema Alicia que me transportò a mi infancia tan querida. Gracias. Excelente. Besoa Baby
ResponderEliminarRealmente "Alicia en el pais de las maravillas"....
ResponderEliminar¡Te felicito!!!!
Besos
Inés
El comentario de Inés salió como que yo lo publiqué (en realidad tenía que salir como Anónimo) pero lo que pasó es que se cayó mi sistema y la PC hizo lo que quiso. Mil disculpas, besos.
ResponderEliminarMaravilloso, excelente, bellísimo. Gracias por la nostalgia. Besos. Antonio.
ResponderEliminarQuerida Alicora
ResponderEliminarun placer leerte
gracias/desde graciela abrazo