Prosa de Rubén Vedovaldi
SOPA DE LA NOCHE
El ciego bebe una sopa de sangre de violines con puñal envenenado. La sopa se escurre por un agujero en la cuchara y cae sobre la mesa y chorrea las patas de la mesa y cae al piso. El ciego arranca la lengua seca de un ángel podrido y muerto y se limpia la boca la cara las manos. Se levanta y sale a la calle a fumar sombras de la noche.
© Rubén Vedovaldi
10 comentarios:
Terrible y certero. Gracias Rubèn
Espeluznate , terrible con un dejo de ciencia ficción
maria elena tolosa
Excelente, querido Rubén. No menos.
un texto bravo. Qué tenía esa sopa?
un abrazo
claudia tejeda
Muy buen poema. Terrible! Pero de esos que dejan marca, Rubén...
Fuerte poema y real. Muy bueno.
besos
Elisabet
A la gran flauta. Un texto que pega fuerte. De excelente para arriba. Estoy tratando de endulzar un poco lo amargo de esas imágenes.
Jorge Luis Estrella
Buen poema, imposible de no sentir el golpe al leer, pero en el atrevimiento del decir está la clave.
Susana Giraudo
Brrrrrrrrrrr
Querido amigo
Excelente poema !!!!!!!
desde graciela abrazo
Tiene imágenes tan fuertes que son dignas de un libro de horror. Rojo texto y rojo sangre lo que queda en la retina.
Saludos
Karina Sacerdote
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