6/12/11

Poema consigna de María Chapp


A G U A

agua que das luz
en nuestros rostros
.... azul verde maná
en el dorado delta
niño de los destellos

deidades mecen moisés
en trenzados papiros
en cavernas de nácar
duerme líquido sol

agua corre
agua lame
agua cura
el antiguo dolor
el agua calme

lago mar que donas
niño príncipe de agua
latidos de cielo ensalma
en altas mareas
agua david
poema lámpara

agua en llamarada
criatura de sustancia maga
.................. niño de Amor
arrúllanos en tu eterna danza

el mundo es sudor
el mundo es lágrima

agua corre
agua lame
agua cura
tanto dolor


.......... el agua calme


© María Chapp
Pintura: Herbert James Draper

19 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

bella imagen, dulcísima. bella interpretación, maria, dulcísima, que me deja dos certezas: el agua calma, el agua cura. me encantó. susana zazzetti.

6 de diciembre de 2011, 22:24  
Blogger ©Claudia Isabel ha dicho...

María, excelente tu poema! Un placer :)

7 de diciembre de 2011, 8:50  
Anonymous milagros rodriguez ha dicho...

María un poema lleno de rítmo y de luz ¡Hermoso!

7 de diciembre de 2011, 22:59  
Anonymous eduardo chaves ha dicho...

María
una profunda mirada hacia el agua que es la fuente de la vida. Belleza sin límites en tu poema. Gracias.
Eduardo Chaves

8 de diciembre de 2011, 11:57  
Blogger Maju ha dicho...

Es una especie de oda a la vida! y genera esa energía vital como el agua. Me saco el sombrero, María! Un beso enorme, poeta!
María Julia Druille

8 de diciembre de 2011, 13:46  
Blogger Isabel ha dicho...

MARÍA , he buscado tu poema y me parece hermoso. Ese niño nacido de la mar-madre àera pareciera una conjunción emtre Eros y su madre Afrodita y el niño de Belén. Es el amor en suma, es el agua que limpia, es la transparencia., es la esperanza con su color verde.El poema insiste en la fecundidad del agua. Siempre el niño es símbolo de promesa. Maravillosa perla ha "criado "la ostra, hermoso fruto ha dado el mar, sede del misterio. Me parece muy bueno, poeta.También magnífico el cuadro.
Un abrazo y hasta el lunes para seguir aplaudiéndote.en la Legislatura.
Isabel Llorca Bosco

8 de diciembre de 2011, 16:13  
Anonymous Anónimo ha dicho...

David Antonio Sorbille dijo...
Mágico poema, bellísimo!! Te felicito, Maria. Un abrazo.

8 de diciembre de 2011, 23:39  
Blogger Marina ha dicho...

María, tenés razón, los antiguos escritos no has tocado. Bellísimo este rezo que se eleva al cielo, padre del agua.
Un abrazo.

9 de diciembre de 2011, 0:54  
Anonymous angel rizzano ha dicho...

como nos impone la "realidad" su

cruel momento,que ante la belleza

virgen,la fulgurante perla nos mo

tiva este Poema y ese piadoso pedi

do final Maria Chapp te Saludo en

Tu lucidez y en la ternura de Tu

Poema Angel

9 de diciembre de 2011, 10:29  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Hermosa conjunción de pintura y poesía, María!. Me encantó la musicalidad que me llega desde tu poesía, en esta invocación al agua que dona la vida y calma "tanto dolor". Precioso!
Un abrazo
Amalia Zacoutegui

9 de diciembre de 2011, 12:41  
Blogger Adriana ha dicho...

María, tu poema es una belleza. Sus imágenes son soñadas. Esa "agua llamarada" es una eclosión de amor poético, un descubrimiento, la unión misteriosa de los contrarios amalgamados para dar vida. Exquisito texto que enaltece la pintura de la que surge.
Lamenté no haber podido ir a la fiesta, pero cuestiones familiares impostergables me lo impidieron. Te mando un abrazo. Adriana Maggio

9 de diciembre de 2011, 23:10  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Con poder sanador , la belleza del agua, de la perla, del niño... en todos los nacimientos!...tu poema dando a luz, calmando con la vida todo dolor,
Abrazos María!
Montse Bertrán

9 de diciembre de 2011, 23:46  
Blogger Marta Ortiz ha dicho...

la perla en la ostra se ha transmutado en ese niño-puente con el más allá, "criatura de sustancia maga", arrullado en esa agua que viene a apaciguar y lavar dolores... bello tu trabajo sobre la sugestión de la imagen, María, conmovedor. Abrazo, Marta Ortiz

10 de diciembre de 2011, 5:24  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Herbert James Draper, Londres, 1863-1920.Pintos de la era Victoriana, estudió arte en Londres, Roma y París. En 1894 comenzó su período más productivo, centrado en los retratos y en temas mitológicos de la Antigua grecia. Su obra "El lamento de Ícaro" ganó la medalla de oro en la Exposición Internacional de París en 1900. fue muy famoso en su época pero su renombre decayó hasta estar cais olvidado en la actualidad.
La obra presentada en este blog se titula: "Niño de agua"

11 de diciembre de 2011, 18:35  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Muy original tu decir María.
Se conjuga perfecto con la pintura.
Cariños
Alicia Borgogno

13 de diciembre de 2011, 13:59  
Blogger galáctica ha dicho...

Hola María: ¡qué hermosa pintura y qué hermoso poema!Una fuerza sanadora emana de estos dos elementos, el visual y el auditivo, una voz que repite el sonido del agua en una dulcísima anáfora que asemeja un líquido fluir, una canción de un niño futuro, una irradiación de luz, que viene también de la mujer, y sesa invocación "tanto dolor/ el agua calme". Lo sentí mucho , especialmente la parte del "niño dorado". Con mucho cariño Irene Marks

15 de diciembre de 2011, 12:18  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Buenísimo querida María.
El agua tiene una connotación tan fuerte tan bella .
desde graciela abrazo

15 de diciembre de 2011, 17:37  
Anonymous betty badaui ha dicho...

La pintura es magnífica y tu interpretación, María, es tan dulce y adecuada que provocan el deleite de las postales que se eligen para agasajar al prójimo.
Felicidades
Betty

18 de diciembre de 2011, 20:38  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Bella interpretación María. Muy bella y profunda.
Abrazo
Alicia Perrig

1 de enero de 2012, 17:14  

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