8/11/11

Poema de Roxana Palacios


Hablar poco

Se habló poco después de la muerte,
se respiró despacio,
caminamos por un pasillo de lajas,
vos fumabas y el humo era otro cuerpo
embolsando mi tapado.
Estaban los cortejos, gente más joven.
Le cantaban a Racing.
Algunos aplaudieron,
nosotros ni siquiera nos miramos.

Se habla poco después de la muerte.
Se escribe poco.
Un tiempo después, un día que no importa,
recibís un mensaje,
estás frente a tus papeles, ves los libros,
la bandeja del mate a tu derecha,
todas las fotografías en tu lóbulo frontal,
junto al agujero del derrame,
y ahí ves la cara de tu amigo,
limpia, enterita, como una caricia.

© Roxana Palacios

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10 comentarios:

Blogger Marta Raquel Zabaleta ha dicho...

triste y bello, Marta

9 de noviembre de 2011, 14:26  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Un poco lo que nos pasa a todos después de una muerte. Y sí, tiene su carga de tristeza, de melancolía, pero no puede ser otra manera y está, tan bellamente dicho Roxi que te felicito. Abracito cordobés.

Lily Chavez

9 de noviembre de 2011, 17:13  
Anonymous andrea pizzella ha dicho...

Roxana, gracias por tan bello poema, me llegó muchísimo.
La ausencia, lo más triste dicho con palabras tan hermosas.
Cariños
Andrea Pizzella

9 de noviembre de 2011, 17:44  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Roxana: tu poema no es sólo bellísimo y doloroso, sino que es, también, absolutamente cierto.
Un abrazo grande.

Alicia Márquez

11 de noviembre de 2011, 11:36  
Blogger Ricardo Juan Benítez ha dicho...

Si Roxana, las muertes prematuras y, probablemente absurdas, te dejan sin palabras. Todo pierde sentido, los pésames y obituarios. Sólo nos quedan imagenes congeladas de efímera alegría.

11 de noviembre de 2011, 12:34  
Anonymous Anónimo ha dicho...

el humo era otro cuerpo embolsando mi tapado, una gran imagen para un recuerdo tan triste que a su vez se hace presente en las palabras y es futuro.
saludos poeta
patricia corrales

11 de noviembre de 2011, 14:33  
Anonymous Anónimo ha dicho...

David Antonio Sorbille dijo...
Querida Amiga: cuando alguien pregunta cómo se escribe con el alma, seguro puede encontrar la respuesta al leer tu poema. Un gran abrazo.

12 de noviembre de 2011, 23:32  
Anonymous Pauli ha dicho...

La muerte nos noquea a todos y a los que quedamos nos cuesta reaccionar. Hermoso poema que me retrotrajo (ya sin desesperación) a la muerte reciente de un ser querido.

13 de noviembre de 2011, 15:04  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Cuando la muerte nos lleva lo que amamos solo el silencio nos da fuerzas , luego vienen las palbras, muy profundas las tuyas por cierto

maria elena tolosa

15 de noviembre de 2011, 0:38  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Un perfecta imagen, un punzante retrato, un poesía contundente como el dolor. Paolantonio

18 de noviembre de 2011, 19:46  

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