Desfile top
Un maniqui
modela medicado
el ultimo lamento de la moda.
Luce un vestido
hambriento de frivolidades
mordiendo los relieves
de la velada.
En el cuello
un collar de perlas homicidas
de billeteras obesas.
Acompaña el atuendo
un sombrero de alas
de mosca bulimica.
Se destacan
unos zapatos
en piel de durazno
de color envidia al tono
hipnotizando
ambiciones oscilantes
en el rostro de la exclusividad.
La euforia del silencio
aplaude.
© Jennie Escobar Montes
Me encantó tu poema, totalmente surreslista. Fiel reflejo de la realidad comercial y estética que vivimos. por ahora menos mal que la poesía no adelgaza jeje.Felicitaciones Jennni!
ResponderEliminarJenni, el resultado de este deslizarse `por la pasarela del arte de ser "ricos y famosos@ es buenísimo.La imagen, acorde.
ResponderEliminarImpresiona profundamente este modelaje que arriesga la vida.
Saludos.Para escribir no necesitás vitaminas ni proteínas.
Isabel Llorca Bosco
Duro, excelente!!
ResponderEliminarDescribís en tus versos, una realidad cruda, pero muy bién escrita.
ResponderEliminarExcelente poema.
te felicitó.
Silvana Merlo
Conocía y admiraba este poema. Excelente por donde se lo mire. Un fuerte abrazo, querida Jennie.
ResponderEliminarJorge Luis Estrella
Aprecio enormemente todos los comentarios!! mil gracias. besos
ResponderEliminar