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16/10/11

Poema de Mariano Shifman


TESTIGO DE CARGO

Sin ir más lejos, quedo,
ahora soy el que observa a la hormiga
acarreando su instinto entre la hierba.

Desde esta ilusoria quietud
juro por mi alma de testigo
comprender su laberinto de briznas.

Estar aquí es el azar de mi oficio;
no ser ella, el latir de un mismo agobio
sobre otro suelo.


© Mariano Shifman

5 comentarios:

  1. la hormiguita laboriosa hace lo suyo y nos enseña mucho en el camino de la vida; a eso nos dedicamos nosotros, a ser muchos como ellas-ellos. Otros son cigarras.
    Abrazos y gracias

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  2. el latir de un mismo agobio sobre otro suelo.
    Qué gran poema en si mismo, Mariano.

    Besosssssssss

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  3. Hola Mariano: este sentir a la hormiga, ponerse en su lugar, entrar en su cosmos, habla de una visión del mundo, una forma espiritual de ver la vida donde ningún ser nos es ajeno, y cada brizna de pasto alberga un secreto maravilloso, al igual que el latido de las hormigas, que es en realidad el pulso de la tierra. Saludos poéticos Irene Marks

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  4. Poema filosófico, con excelentes imágenes, espléndidamente completado y complementado por la imagen. Me gustó mucho. Hoy, observar a la hormiga; mañana o dentro de un rato, ser la hormiga observada. Muy bueno. Saludos. Adriana Maggio

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  5. Un bello poema con exelentes imágenes una verdadera joya de la literatura

    maria elena tolosa

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