Poema de Leonardo Martínez
Tacana
piedra bajo el aire diáfano
molienda azul de las alturas
¿a dónde irán tu aire
tanto azul
el resuello de la tarde
el ondular de los bellidos pajonales
la achacosa sombra
engarzada de luceros?
La dócil ganadería
pasta en las colinas rubias.
El zorzal trina
como una tenue risa
en la tarde clara.
En el hondo barranco
el agua refulge
y es una luz líquida
que se escurre entre las piedras
hasta aquietarse
en la profunda esmeralda del remanso.
En la sierra el aire suena.
Remotas guitarras
flautas que la noche calla
con el fragor del silencio
que derraman estrellas y metales
se precipitan por las quebradas
en la ternura dormida de la tarde.
Cárcel libre donde el aire remonta
azules oquedades
como viento disparado
hacia las altas mareas de la noche
miel de sombras que desborda
la tenue fragancia del rocío
expandido por la faz rumorosa de las siembras.
La penumbra asciende
en el silencio de los valles.
Los cascos suaves de la noche
van pisando los tréboles fragantes
desgarrando la enredadera tibia
de polvorienta luz que se deshace.
© Leonardo Martínez
3 comentarios:
Hermoso poema Leonardo, me sentí dentro del cuadro y llena de esa luz azul líquida que se va perdiendo en el silencio de los valles hasta que se deshace
Leonardo ... qué placer volar con su poesía hasta las honduras de nuestra tierra !!! ... inolvidable su lectura en uno de los encuentros de Farandol en mi vecino pago de Haedo ... usted dejó como regalo su poemario "Las tierras naturales" y entre todos los presentes Carlos Dariel me eligió como destinataria ... un milagrito de esos que a veces nos hace la vida
un abrazo
Lía Miersch
querido leonardo..una descripocion conmovedora!!!!!hermoso poema!!..abrazos maria del mar
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