Poema de Alicia Cora Fernández

9 de julio de 2007

Nieva en la ciudad y en mi balcón planean avioncitos de cristal.
La plaza sin vuelo de palomas y torcazas.
Una clac de verdes palmeras, palos borrachos y magnolias.
aplaude con guantes invernales color sepia.
Los jacarandaes ensayan un desorbitado abrir y cerrar de ojos azul-violeta.
Todo el asombro está en la ciudad, la invade e inmoviliza.
Semáforos de pétalos de luz rojos, verdes y amarillos,
tratando de crear la flor blanca que les falta,
para darle vía libre al lagrimeo sólido del cielo.
Así, en la caída inexorable,
los pequeños copos, apenas nacidos,
escriben su corta vida y su efímero paso por aquí.
Sentencia y realidad de choque contra el cemento.
Luego, más tarde.
Cuando el recuerdo trate de perderse en el tiempo,
tal vez podamos abrir el archivo oculto de nuestras emociones
Allí estarán, intactos, esperando otro día como el de hoy,
Caerán nuevamente desde un cielo plomizo,
para estrellarse en mojadas piruetas sobre el cemento de las calles,
de mi porteño Buenos Aires.

© ALICIA CORA FERNÁNDEZ