cartas de mi padre
en esta letra ligera y trémula
mi padre es ahora un hombre errante.
fue su mano, la misma que temblaba
entre mis manos como un pájaro,
la que escribió este incierto amor
esta dulce deriva,
este dolor que presintió, quizás,
su ausencia prematura.
la palidez de estos papeles
semeja la sombra de su cuerpo,
el resplandor de la arboleda
sofocando el aullido de su corazón.
detrás de estas palabras
apenas legibles, apenas humanas,
las huellas invisibles de mi padre
[su desesperanza, su obstinado fervor]
refutan la certeza de su tumba.
© Ana Gervasio
Delicada nostalgia...
ResponderEliminarGracias!
Siii Ana el poema está hecho de palabras apenas humanas que no terminan de abarcar nuestro sentimiento demasiado humano… Gracias poeta
ResponderEliminarSonia Rabinovich
Esa levedad de nuestros muertos queridos, gracias, Cata Boccardo
ResponderEliminarExcelente, profundamente humano y hermoso como todo lo que escribes
ResponderEliminarBravísima, Ana!!!
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