La yerba cae despacio
la huelo, amarga y hermosa
suenan los pájaros
y el cuero curtido de los yerbateros
que se deslomaron al calor
mientras resistíamos
el viento del mar
me mirás como de agua dulce
el agua está a punto, ese punto imposible
moja una lengua tímida en lo verde
sobre la que clavo la bombilla austera
pero vital, el dedo tapa el aire
que sobra al aire de la yerba
al aire del agua a punto
el aire que sobra al aire
el aroma amargo amable nos inunda
cuando vuelco el agua, toda el agua
que se estanca cerca de la bombilla
se esconde al principio como un gato
y ahora se escucha fuerte el río en la cocina
el aire caliente del sol en la casa
y los pájaros y los perros y el barro
hay luz por todos lados,
con tus dedos rozás los míos
cuando te lo doy como a un tesoro
y le das
el primer beso.
© Carolina Bugnone
Hermoso poema. Y ahora mismo voy a tomar unos mates.
ResponderEliminarJaja, gracias! Buen mate!
EliminarCarolina Bugnone
Me emociona, pusiste en palabras lo que sentimos muchos.
ResponderEliminarQué linda, ¡gracias! ♡
EliminarCaro Bugnone
desde la ternura, un placer tu mate!!
ResponderEliminarGracias, Nerina!
ResponderEliminarCaro Bugnone
Carolina, me encantan las comparaciones que hiciste con un mate. A parte voy a prepararme un matecito y voy a seguir leyendo poesías.Cristina Noguera
ResponderEliminar