Marisa Cascallares comparte a Palermo/Cantera/Mellado

 

 

Un grito cualquiera

 

Vos también llevás

un verbo en la piel,

un dolor que no es tuyo,

una guerra humillada.

La injusticia y la paz,

la muerte en la mirada ajena,

las palabras en nombre de la furia,

un vacío en las manos,

una arruga personal,

un amor intransferible,

un recuerdo que te combate.

Un destino y una voluntad

que te seduce como un amante que falla.

 

Pero también,

un grito cualquiera

tan tuyo como

el miedo, el recuerdo,

la piel, la furia y el vacío,

que no es más que

esta única verdad que nos nombra.

 

© Mariela Palermo

 

me disuelvo

para sentir la tierra

dejo señas

que el viento apaga

 

la grafía de los pétalos

en el aire

contradice

mi dislexia

 

la palabra es humo

una voluta

Lapislázuli

en la boca

 

© María Inés Cantera

 

Diente de león

 

1.

El silencio es una voz que escucho

desde adentro.

 

Es una hoja dentada que me clava su filo

en la memoria.

 

Recuerdo el borde recto de la palabra

que tengo en la punta

de la lengua

ahora.

 

Es el silencio de la hoja

cuando crece.

 

Tuve un tallo fuerte

pero también el viento es fuerte

y arranca árboles

y casas.

 

Me cuesta hablar.

 

Las palabras me crecen como yuyos

al borde de la ruta.

 

Son pocos para un incendio

pero me acompañan

en el camino

que cambia de color

según las horas.

 

Viajo callada.

 

Mando al fondo donde hay lugar

al nuevo pasajero.

 

Me mando atrás.

 

El vidrio de la ventana

se ahúma cerca

de mi boca.

 

© Luciana Mellado