Crujen
Sobre veredas húmedas sin charcos
como detrás de un invisible sulky
ruedan amarronadas las hojas del final,
la música de otoño acompaña el hechizo
sólo falta el farol y el compañero perro
hasta hace pocos días domaban arreboles
sembrando los rosados en un cielo celeste
las hojas son tan sólo respuestas
al cambio conversado de la tierra y el sol
y lo dicen cantando: caigo pero me quedo
llevamos los sonidos del árbol que vendrá
se juntan y comienzan su coro por las calles
no lloran ni se quejan por su último retiro
danzan danzas de cisne, de todo despojadas
y entonces, desde entonces, es que las hojas crujen.
© Héctor Gabriel Ghidini
Muchas gracias Gustavo!
ResponderEliminarHector, el fín, un tema duro que emociona. Cristina Noguera
ResponderEliminarGracias Cristina Noguera! Felicidades!
ResponderEliminarMuy lindo final Pauli
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