Alucinación
Aún escribo
en esta habitación. El jardín
me acompaña
si miro el ventanal. Un pájaro
canta
luego de la lluvia. Ese instante
sonoro
debe ser la felicidad. Entonces disfruto
de algo
tan pleno.
Años así.
No pude mover siquiera un mueble
ni un libro
de este sitio
en el que estoy.
Todos estos libros
a cuestas
me han destrozado.
No sólo me han alimentado. Sobre todo
me han destrozado. Bien sé por qué.
Áspera mi voz
aún escucho cómo se prolonga
-finísimo-
el canto del pájaro.
Muevo entonces
esta mano
miro nuevamente el sauce
a través del vidrio
poco sé,
poco supe,
admito cada una
de mis ruinas, de mis oscuridades
pero apuesto a que
los demonios menores del futuro
que esperan con displicencia
mis continuas caídas
deberían, al menos,
por un principio de pudor
amainar un poco
su confianza.
© Carlos Battilana
Me encanta tu poema. Un placer leerte y saludarte.
ResponderEliminarTu mirada lúcida Carlos, logra ver los repliegues ambiguos de la realidad circundante y siempre nos aporta al leerte, un margen súbito donde reflexionar.
ResponderEliminarQue los demonios del futuro esperen con displicencia y soplen aires de bien...
Alfredo Lemon
Me encantó
ResponderEliminarMe quedo ahí en ese jardín, perpleja ante algunos sentires y derrotas parecidos. Abrazo Carlos !!!!
ResponderEliminarSiempre conmovedor, aplausos Carlos!
ResponderEliminar"Todos estos libros a cuestas me han destrozado" ❤️👏
ResponderEliminarMe gustó mucho! Esos momentos en que los sentidos se expanden... un abrazo Carlos.
ResponderEliminarUn poema humano y más que humano. Gracias poeta.
ResponderEliminarUn poema humano y más que humano. Gracias poeta.
ResponderEliminarMuy bueno Carlos,!!!
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