a veces no hace falta
más que un salto
para doblegar la ausencia
leve salto acariciándote
el cuerpo exiliado
salto que te abre los ojos
fijos en el baldío de la infancia
y a pesar de eso
te rescata del espejo
donde se hunde la tristeza
huye del desasosiego mujer
que no devore
a las flores más tiernas del jardín
esas que brotan
en la casa de la medianoche
© Mirta Venezia
Bravo Mirta. A veces el salto (tan necesario) no es tan largo...
ResponderEliminarAlfredo Lemon
Excelente poema Mirta
ResponderEliminarUn salto para doblegar la ausencia… y tu poesía … la poesía como compañia para la vida
ResponderEliminarGracias Mirta
Sonia Rabinovich
Hermoso decir, hermoso poema!
ResponderEliminarFelicitaciones, Mirta!
Patricia Alonso.
Qué belleza, poeta!!!!
ResponderEliminarQué belleza! El salto subjetivo...
ResponderEliminarqué hermoso encontrarte por aqui despues de haberte conocido en Hasta trilce. Mi admiracion y reconocimiento felicitaciones amiga poeta soy Susana Noe por si no se editó mi nombre
ResponderEliminarMe encantó tu poema Mirta, esa búsqueda de paz
ResponderEliminarLeonor Mauvecin
Tu sensibilidad es inconfundible Mir. Precioso! ♥
ResponderEliminar"huye del desasosiego mujer" rescata de la tristeza a los primeros versos y el poema se abre a la esperanza. Abrazo!
ResponderEliminarLa belleza de tu poesía, Mirta, me lleva de viaje por caminos inesperados. Como siempre un placer leerte. NORA
ResponderEliminarQué lindas imágenes!!! Cristina Noguera
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