Sueño II
Otra vez la misma casa, la misma puerta de rejas negras /
en el sueño alguien dice, esa puerta siempre queda abierta
como a la espera de alguien,
como a la espera que algo suceda
suceda algo
y que ya no se espere, no esperar nada.
Mientras tanto, los días en sus noches acumulan imágenes
develan sitios -
creo no conocerlos -
sé que habitan en todas las madrugadas / en todos los
paisajes
a veces estoy solo / y en otras también pero ahora
detrás vienen unos pasos y con ellos, las urgidas sombras
- mirá a un costado
dicen
- mirá los ojos en la persiana mal cerrada dicen
los pasos llegan al convexo borde del filoso margen o abismo
y luego se ocultan en la penumbrosa boca del tiempo.
desde allí sueltan sus voces (un dialecto difícil de recordar)
pero puedo mirar sus manos, solo un momento
y el viento las convierte en arena, no me pregunten
porque - se disuelven -
ahora sus miradas están ciegas /
me señalan un
límite que ya no existe
la sexta palabra de un poema que aguarda /
y de qué
manera al pájaro herido, lo atraviesa el sueño.
Ahora toda consecuencia es precisa para recordar cada
palabra,
cada movimiento, dentro o fuera de los párpados
así, descender por los laberintos, y en cada uno de ellos
disgregar desde la escritura, el póstumo sueño.
© Mauricio Cappiello
Magnífico torrente de imágenes e ideas plenas. Alfredo Lemon
ResponderEliminarQuedé atrapada en la verborragia de este sueño. Me encantó.
ResponderEliminarStella Maris Soria
Ese misterio!! Bello tu poema, Mauri!!
ResponderEliminarGracias Gustavo, por la publicación, siempre tan generoso, gracias también a quienes dejan un comentario y por tiempo de lectura. ¡Abrazos!
ResponderEliminarConmueve su lectura, felicitaciones!
ResponderEliminarBellísimo poema, querido Mauricio. Una exquisita construcción en verbo de belleza. Zulma Zubillaga
ResponderEliminarAy Mauricio, cuánta belleza en tus imágenes y siempre la voz lírica que busca "su dialecto". Destaco este verso "y luego se ocultan en la penumbrosa boca del tiempo".
ResponderEliminarLos sueños como un dialecto difícil de recordar, las llaves de lo inconsciente desplegado en tu poema de pliegues por descubrir. Abrazos Gloria Arcuschin
ResponderEliminarLos sueños como un dialecto difícil de recordar, las llaves de lo inconsciente desplegado en tu poema de pliegues por descubrir. Abrazos Gloria Arcuschin
ResponderEliminarMe gustó mucho. Un abanico de imágenes.
ResponderEliminarMe encantó tu poema Mauricio. Silvia Durruty
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