MI MAR VA Y VIENE
Después del día
cuando el sol ya no calienta
mi inmenso mar se aleja
se me aleja se retira
de la playa de mi pecho.
El atardecer
alarga mi sombra
que intenta frenar
las olas cuando huyen
crestas de fuego que se escapan
se escurren.
Me siento a esperar la noche
en la arena húmeda
de mi vacío.
La luna con un velo
rociado de niebla
no dibuja mi sombra
a mis espaldas
me recuesto
en
mi orilla desierta
del lado donde las dudas
aprietan fuerte.
Aclara
las gaviotas me despiertan
el mar perfora mis pies
penetra por los huesos
humedece
el pecho en mi playa
lo inunda lo sumerge
otra vez
© Gustavo M. Arredondo
Tu mar ondula en la escritura de imágenes poéticas transparentes y sensibles. Gracias! Alfredo Lemon desde Córdoba
ResponderEliminarHermoso poema. Abrazo.
ResponderEliminarStella Maris Soria
Hermoso poema 💖 también en la etérea descripción de la Soledad! Abrazos Gustavo !!! Gloria Arcuschin
ResponderEliminar