EN EL RÍO
A mí tío Roque Castaño
¿Cuánto de infancia
lleva el río en sus corrientes?
Íntimo es el recuerdo,
se espeja
en el lomo radiante de las aguas.
El sendero ondula
en la pereza insondable.
La maraña es filosa, pero fragante.
Siempre existen los perfumes de ayer:
poleos, quimpis y kellusisas.
El sendero con canciones,
flores en la voz de los niños,
melodía que gira, se esfuerza,
concentrada desciende
hasta tocar las ondas.
Entonces aprendimos a ver,
a sentir una presencia en las barrancas
ocupadas por insectos suicidas.
El sol mojaba
la memoria del agua
que empujan las mojarritas.
Esperábamos el pique,
las cañas erguidas, vigilando
que la mano empuñe un trofeo;
el pez salta y salta en la arena,
como un poseso, un demonio
que mira la luz
de todas las edades;
se queda ciego, con los ojos
aún vivos,
oscuros de atardecer,
mirando para abajo
el sendero de regreso
cerca de las casas.
© Aníbal Costilla
Magnífica y nostálgica tu descripción poética Aníbal.
ResponderEliminar"Cuánto de infancia lleva el río en sus corrientes?"
Saludo desde Córdoba, Alfredo Lemon
Belleza de poema Aníbal!! Felicitaciones! Beatriz Schaefer Peña
ResponderEliminarMuchas gracias, estimados poetas. Un abrazo grande.
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