Poema de Anahí Duzevich Bezoz

  

SOY LA HONESTIDAD

“Eres tan claro y limpio y sin dobleces que el vuelo de una nube te ensombrece.”

Oliverio Girondo 

 

Los valores están a la intemperie…

 

de aparentes artículos, de mentirosos comentarios,

de inútiles discursos, de palabras derrochadas,

de actos de confianza grabados sobre el agua.

Más allá de  un disturbio disoluto

entre poblaciones de aserciones falsas

de mapas confundidos, de apócrifos territorios

de fechas sin tiempo, de premeditados pretextos,

de barajas con trampas.

Mas allá de la sangre inocente,

de escombros de poderes caídos…

 

Más allá de lo que perturba y calla

llevo el corazón viviente…

más allá de la auto comprensión según Confucio.

 

Soy la honestidad y desde siglos

llevo el corazón viviente

dispuesto para el hombre apto.

 

Sócrates, pionero en el esfuerzo de  mi descripción

logró asirme a los límpidos espacios

atravesó la dificultad de mis deberes

auspició las cercanías de propósitos dignos

principios benevolentes y universales de la vida.

 

Soy la honestidad  y   desde siglos

llevo el corazón viviente

hasta el plano indestructible que se abre a mis pies

bajo la gracia de Atenea.

Más allá de la mentira

con la coherencia y la sinceridad

más allá de Hades y el autoengaño.

 

Acá nomás, adherida a  mí

espera la persona honorable

 que valora a la palabra justa, el acto meritorio

 

la persona a la que la verdad no le queda en la garganta.

 

© Anahí Duzevich Bezoz