María
rompió las cercas
y comenzó a dar pasos
descalza /
con la desnudez
que sentía en todo su cuerpo.
Cortó las tradiciones /
la bendición de siglos /
se hizo la señal de la cruz
por las dudas
y gritó la verdad
que le enseñó el océano.
¿Por qué no sublevarse
del relato que oprime?
Quiso decidir
sin libros
ni odas /
sin condenas de moralidad
ni rezos solemnes /
como si recién aprendiera
las vocales.
María
se levantó
de las hojas sagradas /
se desvistió /
tiró las túnicas de yeso y plomo
para sentirse libre.
Atravesó sus huellas /
cruzó los mares
con brazos y piernas de mujer /
quiso escribir su versión
para ser -por fin- humana.
Madre de todas las mujeres.
Madre
de todo el mundo.
© Myriam Arcerito
Conmovedor tu poema, querida Miryam. Te abrazo.
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