No se recuerdan los días, se
recuerdan los instantes.
C. P. 28 de julio de l940.
Diario.
Instante
Una turbulencia balancea
las barcazas. La luz pinta el aire
de amarillos y están cerradas
las viejas puertas. Nadie
en la pescara, ni las góndolas
lúgubres. En el puente de Cannaregio
ni las de lujo ni el vaporetto,
sólo pequeñas barcazas
han pasado la noche entre los palos.
Allá al fondo, un hombre barre
la fondamenta de Ca laria. El resto,
nada.
© María Teresa
Andruetto
Una pintura clara y profunda. Gracias siempre.
ResponderEliminarHermoso!
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