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20/10/23

Poema de Reynaldo Farías

 


CARTA A LA NIÑEZ LEJANA


Pasaron los años 

y el otoño me pregunta 

es decir, mi sangre me pregunta. 

Qué fue de ese contraluz de inocencia

donde amontonábamos la ternura 

y la risa temprana de los sueños.

Qué abismo de quimeras ahogó de estrellas 

las mañanas ociosas de la infancia.

La memoria acude a la nostalgia

y en un dulce amanecer de azahares 

un borbotón de polen 

le crece al naranjo del patio 

trinchera vegetal de horneros y calandrias. 

Hoy, desde esta rama de viento  

me crece un temporal de distancia 

en el desmesurado horizonte de la vida. 

Y una lluvia de asombros  

protege mis manos  

que aún amasan incendios de utopías.

Te abrazo niñez lejana 

con todas las nubes que le quedan a mi cielo.

 

© Reynaldo Farías

2 comentarios:

  1. Cantar la maravilla de esa nostalgia...Bella composición Reynaldo, siempre se vuelve, siempre interpela.. Gracias! Alfredo lemon

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  2. Tu poesía es hermosa Rey. Me envuelvo en esas imágenes inmensas y.precisas. ayy ese remate es precioso.. gracias. ❤️🦋 Graciela Ballesteros

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