3/7/23

Poema de Daniel Ocaranza

 


El agua

se eleva

en una pausa de existencia,

vivimos

en un archipiélago de nostalgias.

Cada paso

escala,

con las manos extendidas,

las cortinas de la infancia.

 

© Daniel Ocaranza

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2 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

La infancia, y nuestras manos extendidas hacia allí, donde siempre pertenecemos. Bravo Daniel, saludo desde Córdoba, Alfredo Lemon

5 de julio de 2023, 10:16  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Muy hermoso... en el agua, ese "archipiélago de nostalgia", las manos escalando hacia la infancia.
Verónica M. Capellino Rando

22 de julio de 2023, 9:09  

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