Aku Oh Haku!*
Dice: "soy calentona, pero no
enamoradiza".
Y le han contestado: "ah re
paragua"
Miro un folleto que promete:
"Ambiente climatizado, paraguayita
aku" (por caliente).
"La patrona te ama, tanto como el
patroncito te desea", pienso,
pero ambos no pagan lo suficiente.
Enamoradiza no; no enamoradiza.
¿Calentona? Puede ser.
Pero no se hagan la ilusión:
no me hago cargo del gentilicio como parche
erótico.
Anuncio:
por la lengua lo mejor pasa
sin todas estas huidizas palabras:
anina nde tarova, pido,
anina nde tarova gua'u, exijo
(busquen la traducción).
*¡Caliente Oh Caliente!
Dolo Trenzadora
Nuestros tatuajes
Piernas, brazos y espaldas
los lugares favoritos
para quedarse la tinta.
Caídas de la infancia
un fémur roto alguna vez
picaduras de mosquitos;
otras marcas punzantes cotidianas.
Agua oxigenada, curitas y algodón,
el ABC de una curación sencilla.
Accidentes de trabajo
un hombro lastimado
golpes de puño;
cortaduras culinarias cotidianas.
Ni qué decir de las marcas del alma.
Tatuajes y puñaladas en la espalda
que bombean directo al corazón.
Todo un cuerpo para escribir
esas otras historias
casi tan invisibles pero no:
van tatuadas con tinta tóxica
que deja cicatrices profundas.
Daniel Rojas Delgado
Ñorairõhápe [En la batalla]
vine a buscarte niño
tu cabeza si la imaginaste inundada en sal
ya no se ahogará
ni vas a ver partida la línea de la vida
dibujada a cepillo
destrozada a llanto
/hoy mi mano hinchada
quebrada anudada
lava tu frente sola
nde resáicha
omimbiva’erã
lo que quede de nosotros
cuando traces tu corazón en el mapa
/mi piel era un sonido en tu barbilla
si la imaginaste inundada de sal pero
te decía:
pensaste la distancia
que sella franja la espalda
nuestro sudor tu beso
viste / remaña orerehe
que nos encorvábamos a la sombra
yatay kuarahy’ãme de las palmas ariscas
toda púas y espinales
que recorrer
para topar tus ojos al fin
brotados del monte
ka’aguy yvapu’ãicha
o alguna estrella que revienta
cuando nos hiere el sendero
pensaste la distancia
que tengo tendrás
de la luz hasta el habla madre
la palabra alma origen semilla
su vientre mi mano y la fragancia
el zumo de la voz
/pensaste la tierra sangre colorada
la distancia yvyra kanguekue, palmo de los
árboles en garra
escrita la vida en la mano
ese otro monte azul nictibio
los hombres el mundo espeso
que nos espera o no
la patria el aliento
el aliento seco que me queda
que me espera
que te salve
Rodrigo Villalba Rojas
Gracias Pola querida y a tus poetas invitades. Abz, Gus.
ResponderEliminarPreciosor de poemas Pola !!!
ResponderEliminarPura belleza!! Gracias Pola!!!!
ResponderEliminarMaravillosos poemas. Marcela Meroni
ResponderEliminarMaravillosos. Marcela Meroni
ResponderEliminarBellisimos poemas !!! Felicitaciones
ResponderEliminar