QUE ME MUERDAN, TOTAL
Ahora que me gusta una chica
no me duelen
las hormigas coloradas,
son como chichoncitos de risa
para mi piel las ronchas,
como airecitos de sol,
pancita de empanada,
como flores que se acurrucan,
se apimpollan de frío,
como tortugas
debajo de la servilleta
o escondidas en el trapo de piso.
Que me ataquen
todos los mosquitos,
que me muerda un perro
y una víbora a la vez.
Ahora que me gusta una
si me llego a morir
ni cuenta me voy a dar.
© Martín Pucheta
Bienvenido Martín a éste sitio que pretende difundir a poetas contemporáneos/as. Abz, Gus.
ResponderEliminar¡Gracias, Gustavo! Celebro el trabajo que llevás adelante en este sitio. Abrazo
ResponderEliminarExcelente, Martín!... Adelante!
ResponderEliminarBienvenido! Saludos
ResponderEliminarBienvenido Martín.
ResponderEliminarBuen poema.
Ana Romano.
Bienvenido! Conocí tu poesía en un curso con Darío Oliva. Un gusto leerte
ResponderEliminar¡Martín querido! Gratos recuerdos de lecturas compartidas me trae tu poema. ¡Bienvenido a esta casa comunitaria! ¡Gracias, Gustavo!
ResponderEliminarEstupendo poema!
ResponderEliminarBesosss
Bienvenido Martín!!!
ResponderEliminarBienvenido! Muy simpático POEMA! Vale! ADELA.
ResponderEliminarBienvenido Martín!
ResponderEliminarBuen poema.
Bienvenido Martín,
ResponderEliminarY sí, a veces nada importa o duele tanto si se tiene la gloria de un sueño cumplido. O una luz. O a ella. Felicitaciones
Cristian Jesús Gentile
Frescura y naturalidad..
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