ÚLTIMA FRONTERA
Ellas se toman de la mano con la tarde
y se van silbando bajito la esperanza.
No tienen distancia en ellas
el azogue y el dolor.
La tierra del estremecimiento
se conjuga en un íntimo instante
de gozo y paroxismo
Una sola noche, una sola sábana
un solo sueño, un soplo de eternidad
y el fraude se perpetra.
Surge entonces
la precisa intuición de los finales.
Nos han robado la cintura por siglos
por siglos, la ilusión y los perdones.
Ríos de leche en la singladura del tiempo.
Nunca la voz más alta que los grillos.
Siempre las piernas como última frontera.
Avísenles a todos que no más el silencio.
El clamor se elevará
en las vértebras del
aire.
© Marta Elena Guzmán
Ufff qué hermoso leerte maestra. Gracias.. inmenso poema.
ResponderEliminarGraciela Ballesteros.
Interesante G:E:
ResponderEliminarqué fuerza vital, Marta!
ResponderEliminarun placer leerte!
abrazo
Claudia
Poema sororo🌹 Gracias Marta querida ❣️
ResponderEliminar