Mientras te mirás el ombligo la realidad
te abandona/ cuanto subís al nombre de pila
y llamás tu mundo/ se diluye en penumbras
de interior –no queda en palabras ni en
memoria–.
Tras cacerías el dinero tortura/ y mata en
cada cosa.
En este tiempo de nuevos goliardos reina el
precio:
la fortuna es emperatriz* de trono firme/ y
escasa
la visión de luna llena. También vos
banalizás
todos trivializan la mirada/ el amor
es
píldora a tragarse tras la cena
y la mujer solo en primera persona difiere
de la nueva basura social. Dicen/ han dicho
los
recolectores.
Temblá pobreza en la piel/ aferrate poder
del cetro/ porque fortuna los derrite y no
demora
en devolver espectros al océano. Allí:
donde desciende el polvo y adunan las
fronteras.
–*Carmina burana:
Oh Fortuna /variable como la Luna/
como ella creces sin cesar/ o desapareces…–
© Carlos Enrique Cartolano
Gracias Gustavo!!
ResponderEliminarExcelente Carlos Enrique Cartolano. Un placer leerte 👏👏👏👏
ResponderEliminarMaria Gabriela Micolaucich
Feliz de leerte Carlos 👏👏👏👏👏 Maria Gabriela Micolaucich
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