Poema de Marcela Rosales
OTRAS GUERRAS
Por esa lengua otra que nos une
más allá de idiomas
y nos salva en todos los silencios.
Algunas tardes soy apenas
un cuerpo detenido en la otra
orilla de una ciudad ajena
de pie con otros cientos
que aguardan silenciosos.
Entonces pasa algo
un sueño sin niño, pasa,
un pájaro sin cielo.
Con el pecho descubierto
lo veo avanzar en zigzag
por la avenida, entre bocinas
y luces centelleantes.
Todo él un macizo
de tendones y de carne
trae consigo
la oscuridad del mar
hermano de sus padres
y sus hijos.
No es ya un hombre quien
camina, pienso.
Su mirada es alta
como un farallón sin grietas
-forjado a balsas, a balas
y a banderas-
donde la muerte se estrella.
Algunas tardes
esa ciudad ajena
como una ola enfurecida
cruza hasta mí y golpea
mi corazón con una piedra
negra.
© Marcela Rosales
Etiquetas: Marcela Rosales
4 comentarios:
Hondo, bello, verdadero. Gracias...
Gracias querido Jorge, un fuerte abrazo ✍🏽📚⚘
Algunos días esa ciudad, despierta poemas como éste, conmovedor.
Gracias querida Belkys, una alegría encontrar tu comentario ❤!!
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