Puente de Rasti
Vengo de regar las plantas
bajo la lluvia.
No puedo pronunciar la esquila.
Las fotos traen instantes completos
cuando el árbol generoso
prodigaba pelusas de durazno.
Y qué se dice con medio pecho
si el niño pregunta por su padre
y se duplica la espera
en posibles bienvenidas
de superhéroe que no falla.
Van y vienen
las mariposas de la decepción.
Y algo se derrumba
como un puente de Rasti
entre dos mundos injustos.
© Claudia Tejeda
¡Claudia! Que bella tu comprensión, tu ternura atempera la angustia de la espera infinita.
ResponderEliminarSusana Giraudo
Ayyy poeta..💔 ayyyy ❤🦋
ResponderEliminarDoloroso,bello y profundo .Duele esa ausencia. Abrazos
ResponderEliminarLeonor Mauvecin
Belleza de tus palabras que supuran la doliente espera. La poesía, ¿mitiga en algo los duelos? Te abrazo grande Claudia. Alfredo Lemon
ResponderEliminarmuy logrado poema! lo he vivido de hija. Me llegaron mucho los versos finales que a su vez van llegando despacio.
ResponderEliminarGracias
La vida ahí en el poema. Gracias
ResponderEliminarDesolación de la no respuesta.
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