LA SENSIBILIDAD ES UN OCÉANO PRUDENTE
La sensibilidad en un océano prudente, lo sé, es el despojo de los amoríos naufragados el que me hace caer. Son golpes, tarde me doy cuenta que estoy a punto de ahogarme. Tarde, cuando la ruina es una enorme ola antes del fin.
La sensibilidad me atraviesa, nunca me mata, me deja en el borde con ese vértigo delicioso que encumbra las dosis de amores frustrados. A veces sonrío, me veo con los ojos húmedos, perdidos y me siento viva. Es el amor el que nos hace naufragar, sin él nada somos, y si no somos, la metáfora primera sería imprudente.
© Romina R Silva
Potente sensibilidad en tu poema que arrasa. Bravo Romina, Alfredo Lemon
ResponderEliminarAmiga , la sensibilidad cómo océano,bello bello . Gracias 💫
ResponderEliminarDetenida allí...en la punzante decisión solo el Amor! Besos
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