Veo tus manos
eslabonando el aire,
la lluvia se derrama
sobre los hombros tibios,
hay un sabor perdido
del último agosto
que regresa en las uñas
calientes del verano.
Me duelen los crepúsculos
y las despedidas,
el viento se lleva
los pasos de la tarde,
hay un gris espeso en la ciudad
y tus ojos
clavados en la luna.
© Beatriz Arias
Hermoso poema Beatriz. Silvia Durruty
ResponderEliminarGracias Silvia! Beatriz
ResponderEliminar