CRISTINA MUERTA EN TRELEW
Ella
amaba los números
(el seis
especialmente
con sus aires de niño no nacido).
Hoy
hilvana teoremas
con plumas y cenizas y aguijones.
Sobre la triste textura
del poema
su mano
empuja mi mano
que se tuerce
hacia la desmemoria.
Hermoso !!!
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