Poema de Lydia Helander
ESTEPA
Sola,
de soledad
infinita,
agobiada
por el silencio
mientras
cae la tarde
sobre una
calle
donde nadie
pasa,
oigo ladrar
los perros
del vecino
y me asomo
a mirar
el naranjo
de naranjas
amargas.
A veces, un
camión
o una
bicicleta
rumbean
levantando
polvo,
vaya a
saber
con qué
destino.
Entonces me
vienen nostalgias
de ciudades
en las que viví
y de sus
avenidas luminosas.
¿Qué hago
acá? me pregunto,
¿He venido
a morir
como un
perrito
al abrigo de estas cuatro paredes
que albergan mi osamenta?
o sólo estoy de paso
como siempre ha sido
arrojada hacia el sur
hacia la estepa.
© Lydia Helander
Etiquetas: Lydia Helander
8 comentarios:
Bienvenida Lydia a éste sitio que pretende difundir a poetas contemporáneos/as. Abz enorme, Gus.
Bello e inquietante poema, Lydia, felicitaciones!! Bienvenida al hermoso sitio de poesía de Gustavo!!
Bienvenida Lydia, y qué gusto leer tu poema.
Cuidadosamente hilvanadas las palabras, para el decir.
abrazo y saludo cordial
Bienvenida Lydia, hermoso poema, gracias!
Bienvenida, me gustó tu poema. Gracias por compartir.
Ana Romano.
Bienvenida Lydia! que bueno encontrarte en Mis poetas, descubrí una poesia profunda y agradable en tus letras. Nos leemos. Abrazo
Romina R Silva
Bienvenida bello poema!!
¡¡¡Hola Lydia y bienvenida!!!! Un poema donde el yo lírico va creando un clima de soledad y amargura que va in crescendo. Imágenes muy logradas y una sensación de desolación y abandono que todo lo invade.
Ese final "arrojada hacia el sur", marca un destino, una fatalidad que no depende de quien escribe, sino de alguna fuerza externa.
Un grandísimo poema
Irene Marks
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