LAS HORAS
LIBRES
Escapan del colegio (es secundario)
y aún no se ha agotado la mañana:
logran burlar las penas, el horario;
las cadenas de “No” que el día hilvana.
Lo que parecen son: ardor primario,
antenas de placer y piel lozana.
Encuentran sin buscar (no es necesario):
les basta ser lo que les viene en gana.
Hay que aprender a no ser aprehendido
durante el tiempo impar del estallido;
a distinguir corbatas de arduas sogas.
Se sabe que la escuela no lo explica;
en una vida fieramente rica,
las horas libres son las pedagogas.
© Mariano Shifman
Mariano muy buen poema, y diría que su temática es para tu excelente especialidad en el soneto. En tus versos,la verdad a la vista... y el aprendizaje, una decisión. Felicitaciones
ResponderEliminarMaría Paula Mones Ruiz.
LO HE VIVIDO QUERIDO MARIANO!! TE FELICITO hermanito.
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