(el día es de otros/ cabe robar la noche / llena de auroras fugaces)
A media noche
desde la desolada noche de un suburbio de frío y soledad
los trenes la emprendían en busca de un albur un tacto
el oro falso que prometen los sueños
¿Qué nos nombraba entonces?
Cumpliríamos
el más alto de todos los ritos
celebraríamos presencia y juego
Superficies
pretendiendo anudarse
Retóricas de silencio
insistiendo
una luz
¿Qué
sino prodigio
en topetazos antiguos
y sabias recompensas
del
alba?
© Carlos Alberto Roldán
Equilibradamente ambiguo y misterioso. Me gustó. Alfredo Lemon desde Córdoba
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