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27/1/21

Poema de Teresa Gómez

 


 

MI ABUELA                                                

…fue como mirar un pájaro ausente que seguía cantando…

Mónica Angelino

                                                                                                 


Con su criolla dignidad

mezcla de guaraní y de señorío,

ella bajaba por la planchada

jazminada de aromas,

azaharosa de naranjas florecidas.

Mi abuela correntina llegaba al puerto

después de casi cuatro días

de recorrer el Paraná en aquel barco,

jangada rumorosa de voces y esperanzas.

Mi hermana y yo, con tapadito rosa

y capota haciendo juego, 

éramos el testimonio de la opción capitalina de papá,

que en tránsito estudiantil de Goya a Buenos Aires,

del muelle flotante al puerto firme,

se enamoró de una porteña

y se quedó en San Telmo.

Vestida de negro, con su tez cetrina,

 su mirada bruna y su pequeña trenza

apenas entrecana arrollada en la nuca,

mi abuela correntina respondía

con leve sonrisa a las bienvenidas.

 

Eso me queda. Hoy su inasible sonrisa

titiló un instante, se recortó presente y luego,

como siempre, naufragó hacia la sombra.

Brilla y se desvanece.

Adónde se refugia lo vivido?

Adónde espera con paciencia

para ser convocado?

Desde que sitio sin cesar nos nombra?

Adónde, en blanco y negro,

están las nenas de tapadito rosa,

tomadas de la mano de su abuela goyana

de pie en un puerto que ya tampoco existe…

 

© Teresa Gómez

4 comentarios:

  1. Gauuuu!! Qué bello tu poema! Es así: pájaro en la ausencia que sigue cantando en la memoria!!

    Gracias por considerar ese verso mío!!

    Besosssd

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  2. El poema cuenta una historia. Nombrar para que las presencias sigan, nombrar para lo vivido diga presente, nombrar para que los seres no pasen desapercibidos por este nuestro mundo tan dado a lo urgente y efímero. Responsabilidad del poeta. Aplausos y abrazo. Marta Comelli

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