CASI VIVA
Tu rostro se replica en espejos infinitos,
yo sólo te dedico estos versos,
los que escribí llorando.
Estoy casi viva, es que
casi muero el día que partí.
Siempre se vuelve al primer amor.
Siempre. No se olvida.
Música que atrae, irresistible,
melancólica, como un veneno dulce
espera un abrazo plagado de peligro.
Lluvia en música de tango
cara desconocida del primer amor.
Cruel, compasivo,
sonríe a veces, otras, grita de dolor.
Hay un acordeón que no puedo eludir
algún zaguán entre adoquines.
Humedad en el aire y el corazón.
Lágrimas impregnan hoy mi piel.
Es tan enorme este amor, primer amor.
Me alejo, y vuelvo, cada vez,
cada vez más temprano
casi viva, casi muerta.
Te mostrás un instante y
es tu cuerpo un hechizo de luz
devorado por fantasmas.
Cuando te engalanás con jazmines
no me resisto al perfume de azahares.
¿Vos me soñás acaso?
¿Escuchás mis pasos cansados sobre el
callejón?
Primer amor, deseo de amor enamorado,
en rocío de plazas, mármoles, ventanales.
Complicidad infinita.
No me traiciones amor,
no nos traiciones.
Primer amor, algún día,
me dirás tu nombre.
© Silvia Susana
Durruty
No hay comentarios:
Publicar un comentario