CAMINO A LA OBRA DEL COUNTRY
La espesa niebla que nos cubre
está en su etapa
de acumulación primaria.
Todavía la chata avanza. Pero desde
temprano
que a lo lejos se escucha
venir un rodar de acero. Abrimos las
ventanillas
para
tocar si llueve
y la brisa nos devuelve
los primeros efectos del terror: Un caballo
en el medio del camino
asoma su mejilla hasta el hueco de mi mano;
si no estuviera en relación con el clima
que afuera se respira, diría que forja
la humanidad de la mañana.
Pero en su nuevo ropaje
por nuestra seguridad las viejas formas
de la intervención. La chata avanza
sobre las marcas blancas de la ruta.
Una, dos, tres. La niebla siempre
puede ser más espesa.
© Fabián O. Chazarreta
Tantas veces, suele ser fatal! Poema realiista! 👏👏👏👏
ResponderEliminarSiempre puede!
ResponderEliminarGran poema!
Besosss
Qué bueno! Es lo que sucede- puede suceder- en la niebla, en el mundo. Abrazo, Inés Legarreta.
ResponderEliminarEstupendo poema! esas imágenes... y la mejilla del caballo... todo muy bello
ResponderEliminargracias Fabián
norma starke
La niebla como en los sueños todo es posible. Muy bueno
ResponderEliminarUn abrazo Graciela Barbero