Cerca del paraíso
Llevo aquí cinco horas desde que llegué en
bus de doble piso. La camioneta que pasaría a buscarme se rompió. Raro, no me
importa, leí el libro de Clara Vasco completo. Leí el Feng Shui pero no me
interesa. La casa de Mujica Lainez está
a 4 Km., mañana la visitaré. Compré
maníes y papas fritas. Tomo una cerveza en la terminal de La Cumbre, sola,
releo Clara Vasco; nombra a Chascomús, eso me gusta porque está cerca de mi
pueblo. El centro es pequeño, mucho cielo para mí. La gente saluda, se conoce.
Noto la cerveza en la vista y en la lucidez. Escribo rápido sin pensar. Ronda
mi vieja fantasía de evaporación o como en las películas, que un ovni me
secuestre. El dueño del bar, ya es mi amigo. Todos pasan y me saludan llevo
seis horas de permanencia. No me importa, me quedaré aquí hasta el infinito,
las sierras me custodian. El perro cruza lento. El cielo es mío.
© María Cristina
Briante
Preciso relato María Cristina, seguramente el entorno de La Cumbre y Cruz Chica ayudaron con inspiración a tu talento en estas palabras de vivencias y belleza. "El cielo es tuyo" y nuestro, al leerte. Alfredo Lemon desde Córdoba
ResponderEliminarMuy buen relato ,Cristina
ResponderEliminarAbrazo, Inés Legarreta.