Sonrío
cuando me reprochas
mi obstinado fervor por las ventanas.
Dibujo una mueca
que te distraiga
que te salve de mi asombro
cuando las burbujas de sol
invaden mi cocina
llenando de cristales
los techos,
y el paraíso que plantaste
con sus tallos y sus ojos
se rompe en lila
en el jarro donde hiervo la leche
para poder servir el amor
en cada taza.
© Ana Julia Saccone
Muy bueno Ana Julia!!!
ResponderEliminarUna pintura que crea un clima que casi se toca. Muy bueno. GRAcias.
ResponderEliminarPura luz!!
ResponderEliminarBesosss
Tu poema irradia ternura y luminosidad, toda la que tu ventana deja entrar. Muy bella tu mirada Ana Julia.
ResponderEliminarDerrítome, Julia!
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