LAS COSAS QUE HABRÍAN PODIDO SER
esperan su momento.
Permaneces remoto. Ellas no.
Están. Te sorprenden
en un silencio o en un resplandor,
en un relámpago brillando al
giro de una esquina.
Entre palabras. Un viento
son. Un fuego. Una
ráfaga entrecortada. Un
error. Un acierto.
Se dicen, solas,
aparte. Descarte de las
horas, de los días. Están
al acecho, en una
sombra, una penumbra.
No te olvidan.
Escucha. Vienen por vos.
Como todas las noches,
vuelven. Te sueñan,
te buscan.
Llegan. Abren
la puerta.
Es hora.
© Hugo Echagüe
El misterio agazapado de lo que pudo ser... ¿ a quién no desveló alguna vez?
ResponderEliminarHermoso poema.
Muy bien dicho, expresa mucho, gracias Hugo! Alfredo Lemon desde Córdoba
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