dice mi madre, inocente,
que nací de un repollo,
cuando lo dice no mira mis ojos,
no ve que desconfío
llega mi padre del trabajo
lleno de paquetes
un cinco de enero.
mi padre no ve que lo veo.
esa
noche no duermo
veo
pasar los camellos
por el ojo de una aguja
y a los ricos entrar
en el reino de los cielos.
Jesús no me ve
crezco y miento
envejezco y me mienten
un payaso
dice que no tema,
que todo va a estar bien,
el payaso,
como una catástrofe,
como un sino,
no me ve,,,
© Alicia Pastore
Muy bonito, Alicia!
ResponderEliminarCariños.
Marta
Tremendo poema, Alicia! Me conmovió profundamente. Siento lo mismo.
ResponderEliminarAna María Oddo
Así es, Alicia, fuerte poema.
ResponderEliminarAbrazos
Elisabet
Qué bueno la mentira y la inocencia y a veces cruel saber y no saber. Me encantó. Un abrazo Graciela Barbero
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