3/6/20

Marizel Estonllo recuerda a Atilio.J. Castelpoggi





Escrito a mano     

Las letras de un poema 
 son rostros desconocidos 
 de uno mismo. 

Su tinta sobre el papel en blanco humedece 
 las formas mágicas del sueño. 
Por eso las palabras ebrias de lo fugaz beben la 
inmensidad de lo creado. 

Cuando se escribe a mano, 
uno se intima en la desnudez de la imaginación 
Como los ojos ávidos del cazador ante su presa 
De esa manera veo un condenado a muerte 
Que lleva en sus manos un cántaro de sombras 
Y solo estoy mirando mi propio espejo en llamas. 

La poesía es una larga memoria que no deja de sangrar.

© Atilio.J. Castelpoggi





AUTORRETRATO

El fuego quema hasta purificar la llama
 en el espacio de las palabras

Deseo ser una brasa en el deseo.


© Marizel Estonllo

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3 comentarios:

Blogger Amalia Mercedes Abaria ha dicho...

Marizel, fue mi maestro en la poesía, en mi juventud. Gracias!!!

6 de junio de 2020, 14:55  
Blogger Romina R Silva ha dicho...

Me encanta este poeta, gracias por traerlo.

7 de junio de 2020, 1:33  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Atilio, increible poeta y maestro que no tuvo su altar merecido, vaya a saber porque causa no esta dentro de los grandes cuando lo fue, por suerte permanece en los corazones y vivencias de quienes tuvimos la fortuna de conocerlo.
Siempre y por siempre Atili Jorge
Patricia Corrales

19 de junio de 2020, 10:50  

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