Yo tenía 7
años y ella, 20.
Era rubia,
hermosa, delicada.
El acento
ruso.
Los ojos
azules.
La caja de
música,
un molino
que giraba.
Su ballet
de luces.
Yo,
fascinada con la caja de música.
Ella,
melancólica y callada.
© Raquel Fernández
bellisimo poema!!!
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ResponderEliminarLa fascinación de las cajas de música. La infancia. La gente que conocimos y nuestro recuerdo.
Qué bueno.
Un abrazo,
Alicia Márquez
Me gustó y me llevó a mi infancia con la cajita de música Abrazos querida amiga
ResponderEliminarMuy bello!
ResponderEliminarflora levi
Me emociona. Hermoso. Griselda Rulfo
ResponderEliminarHermoso poema. Siempre la tristeza, en el fondo de lo bello, como un sello. Beso grande. Adriana Dirbi Maggio
ResponderEliminarAun si no hubiera leído tu nombre, reconocería tu estilo!!
ResponderEliminarBello!
Besosss
A veces la belleza no es el alma de la vida.
ResponderEliminarMe encantó.
abrazos
Elisabet