EL POEMA
Que el
poema se atreva con lo que se pudre.
Con el
miedo callado que aprieta la garganta.
Que hable
de los caminos solitarios.
De los
seres tristes.
De lo que
amenaza en el silencio
¿Acaso
permanece la orgullosa estructura de los
cuerpos?
Del amante
oriental recuerda solo el bullicio de la calle .
La sed sí.
La sed es
para siempre.
© Clelia Bercovich
MUY BUEN POEMA, QUERIDA ClELIA. ME GUSTÓ MUCHO "DE LO QUE AMENAZA EN EL SILENCIO".
ResponderEliminarUn abrazo Isabel Llorca Bosco
se atreve el poema, clelia, es para siempre, como tu sed.precioso. susana zazzetti.
ResponderEliminarMe encantó, ese alegato , esa necesidad de denunciar lo que duele
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