un vestido
húmedo
se seca al
sol.
arde en la
temperatura de la siesta.
en la
parálisis de la hora
hojas de
espinaca en el afuera
danzan
libres
una y otra
vez.
reman
contra el hastío y el viento.
detrás de
la puerta
está la
barbarie del mutismo.
hay polvo
en las palabras.
cenizas.
nada que
tenga vida.
salvo las
hortalizas y los niños.
© Susana Zazzetti
¡Oh!, Susana, qué buen poema.
ResponderEliminar"arde en la temperatura de la siesta"
Rolando
www.revagliatti.com
Bravo Susana! Sutil e inteligente. Saludo afectuoso desde Córdoba Alfredo Lemon
ResponderEliminarExcelente poema. Me transmite esa desolación de ciertas horas, de ciertas siesta de verano. Has ganado la batalla contra la resistencia de las palabras: me parece un poema muy logrado."parálisis de la hora", espinacas que "reman contra el hastío y el viento", 'barbarie del mutismo", "polvo en las palabras". Cuántos aciertos en un poema tan breve.
ResponderEliminar
ResponderEliminarLeerte y quedarse en las palabras
Lily Chavez
Querida Susana,
ResponderEliminarqué buen contraste de imágenes y sensaciones en este poema, se siente la frescura de las hojas, su libertad y la del vestido, así como también se sienten la sequedad y aspereza al interior de la casa.
Un abrazo
Juany Rojas
Esa exactitud del lenguaje que define a tu poesía arde en palabras ralentadas que mastican el polvo que el viento distribuye. Intuyo una gran metáfora. Felicitaciones, querida Susana!!
ResponderEliminarExcelente poema que expresa maravillosamente la hora detenida de la siesta, en la que casi todo cesa. Un beso. Adriana Dirbi Maggio
ResponderEliminarHAs sembrado tantas palabras, que sin dudas este poema florecerá.
ResponderEliminarSaludos.
Anahí Duzevich Bezoz
HAs sembrado tantas palabras, que sin dudas este poema florecerá.
ResponderEliminarSaludos.
Anahí Duzevich Bezoz
Al leerlo uno siente que camina con tu mirada y recorre en ese silencio de las horas, una a una las imágenes que desgranado con ese estilo tan propio de vos: elocuente y sin estridencias.
ResponderEliminarSusana Giraudo